jueves, 24 de diciembre de 2015

Navidades.

Los quiero. 
Sé que soy la más callada. 
Las más solitaria. 
Las más apartada. 
Pero los quiero. 
Es más, los amo. 
Porque sé que siempre contaré con ustedes. 
No importa los problemas que tenga con mis padres. 
Con mi vida diaria. 
Estarán ahí, porque quieren.
Porque me aman. 
Y yo también los amo, abuelos. 
Son lo mejor. 
Abuelo, amo tus historias.
Abuela, amo tu comida.
Abuelo, amo tu carisma. 
Abuela, amo esos remedios raros que haces y la manera en que me sonríes gentilmente siempre.
Hay miles de cosas, y todas son especiales.
Ustedes son especiales. 
Y los amo, de verdad. 
Y lo siento, si he sido mala. Grosera. Egoísta. 
Lo siento tanto. 
Y los amo. En serio. 
No lo duden ni por un segundo. 

miércoles, 2 de diciembre de 2015

Derrota.

¿Conoces esa sensación? Esa, como si pudieras haberlo hecho mil veces mejor.
La impotencia en tu pecho y las lágrimas en tus ojos mientras saboreas el ácido dolor de la derrota.
Mientras lamentas todo, y lloras amargamente.
Sí, esa.
Que te sofoca hasta querer ahogarte en tu propia miseria y dejar de existir.
Sé que pude hacerlo mejor, pero ni siquiera lo intenté. Me limité a perder el tiempo en cosas vanas y estúpidas.
Cuanto lo siento.
El sabor de la derrota es ácido, quema tus entrañas y ahoga tu garganta con un nudo.
Ni siquiera sé manejar enteramente la decepción, ni mía, ni en la mirada de los demás.
Estoy perdida, incluso más de lo que ya estaba. Quiero encontrarme.
Quiero creer que puedo. 


martes, 1 de diciembre de 2015

Estoy de vuelta.

No sé qué esperar exactamente. 
Quiero decir, ya sé que he hablado muchas veces de lo mucho que estoy asustada de mí y de los demás, y de todo. 
También, he hablado de lo ofuscada que me siento constantemente, y es como si nadará contracorriente conmigo misma. 
He hablado de mis insoportables y drásticos cambios de humor, y la manera en que estoy dispuesta a hacerlo de lado y sonreír, esperando redimir un poco el dolor y la tristeza. 
Carcajadas vacías. Sonrisas efímeras. Y un sentido del peligro letal. 
No sé quién soy, ni sé tampoco, si en media hora me sentiré feliz o triste. 
Quiero creer que es la edad. 
Quiero creer que son las circunstancias. 
Sé que soy lo suficientemente inteligente para no dejarme llevar y tratar de controlarme.  
Pero me molesta la incertidumbre, y a veces solo quiero llorar. 
Simplemente, no le encuentro el sentido a esta constante obra de teatro en la que hemos convertido la vida, poniéndonos máscaras y pretendiendo ser alguien más, ¿Por qué no aceptarnos cómo somos? ¿Por qué no aceptarme yo como soy?  No sé, y el no saber me obsesiona, el remolino de inconformidad en mi pecho no tiene explicación, y la soledad me ahoga en tardes oscuras acompañada de música depresiva.

Pero nadie lo nota, si yo no lo digo. Mamá dice que es porque soy fuerte. 
Yo simplemente creo que soy estúpida. 

sábado, 19 de septiembre de 2015

fake happiness.

Ella grita.
Yo permanezco indiferente.
Ella grita más.
Solo un nudo en la garganta.
Sus gritos hacen eco en la casa.
Y el nudo me asfixia hasta que se me humedecen los ojos.
Es ahí, cuando bajo la mirada, porque no puedo permitir la debilidad. 
Porque no voy a permitir que ella vea cuanto me afecta.
Ella para, y me amenaza.
Yo asiento.
Porque no sé qué más hacer.
Se va.
Y yo me quedo sola, de nuevo, con la impotencia y el nudo asfixiante a punto de desatar un mar de lágrimas.
Pero no, llorar no es bueno.
Así que cierro los ojos y cuento hasta tres.
Después, sonrío. 

miércoles, 16 de septiembre de 2015

Novedades :)

Lentamente pierdo el objetivo.
Y no tengo los pensamientos de antes,
y me gusta más arriesgarme a todo.
Solo quiero huir.
Y dejar de pensar, 
dejar de darle mil vueltas al asunto.
Me estoy volviendo más  maldita, 
más superficial, llena de rencor, 
y ganas de estrellar la cabeza de todos contra el piso.
Estoy obsesionada con mi cuerpo también.
No quiero comer, 
y tomo agua todo el tiempo mientras paso horas haciendo ejercicio.
Solo quiero ser bella, 
solo quiero ser bonita.

No me importa más, 
porque ya no veo el sentido. 

sábado, 29 de agosto de 2015

sin nombre.

¿Soy yo, o todas lucen delgadas o bonitas comparadas conmigo?
¿Soy yo, o es que mi reflejo no miente y soy una masa deforme de  inconformidad?
 ¿Soy yo, o verdaderamente soy fea, gorda y de malos sentimientos?
 ¿Soy yo, la que tengo razón?

Ojala y no. 

viernes, 21 de agosto de 2015

Vivir.

Quiero vivir,
Quiero vivir mi vida.
Quiero olvidar el nudo en la garganta.
Las lágrimas amargas.
Los gritos sofocados.
Las marcas en mi palma.
La hora desvelada.
Los días perdidos.
Los momentos solitarios.
Quiero vivir,
Quiero vivir mi vida. 

viernes, 7 de agosto de 2015

32.

Estas viendo sin ver.
Tocando sin sentir.
Estas respirando sin vivir,
En un constante estado inerte.
Presa de la monotonía auto impuesta.
Nada te inmuta, ni siquiera la brisa de verano que alza tu vestido negro y tu cabello oscuro.
Los libros resguardan tus lágrimas entre sus páginas agrietadas y amarillas.
Tu paladar no conoce el dulce del amor.
El abismo de la muerte te lleva, hundiéndote en esa frialdad oscura que se cala en tus huesos.
Tu alma se destruye, a la misma sintonía que tus cigarros.
Ya no puedes oler, el humo tranquilizador, ni el olor de la comida, que tanto te obsesiona.
Tus huesos son montañas sobresalientes en tu piel seca y amarilla.
Tus ojos son dos cuencas oscuras, sin vida.
Tu pelo es una maraña oscura, que antes solía recordarme a la noche, y ahora, me recuerda a un lugar sin fondo.
Ya no estás aquí.

Estas muerta en vida, esperando por la misericordia de dios.

miércoles, 5 de agosto de 2015

Realidad.

Vive esa mentira, mi pequeña niña buena.
Ve la televisión e imagina tu propia historia de amor.
Sonríe a la cámara y ríe cuando te abracen.
Llora, grita y corre.
Se feliz.
Siéntelo, antes de que se vaya.
Antes de que crezcas.


miércoles, 8 de julio de 2015

La luz.

Son estos pensamientos oscuros rondando en tu cabeza.
El latir del corazón, zumbándote en los oídos.
El temblor patético en las extremidades.
El pesor en tus manos, la frialdad.
El coraje fluyendo en ti, llenándote.
La pesadez de tu cabeza, y el frio en la sien.
Un movimiento.
Manchas escarlatas.

La luz. 

sábado, 27 de junio de 2015

u n o.

Chicos con mentes rotas,
frotándose unos con otros.
Luces fluorescentes bañándolos con su luz.
Chicas vacías,
aspirando ese polvo de estrellas.
Chicos perdidos,
enrollándose con tías de rostro desconocido.
Todos ellos, rotos.
A su manera, pero rotos.


jueves, 25 de junio de 2015

Cobarde.

Honestamente, considero patética la manera en huyo de los problemas,
solo leo.
Leo, leo, leo.
Me gusta perderme entre los libros,
En la vida de personajes ficticios,
Vivir realidades inexistentes.
Pero es cobarde, lo sé.
Pero, solo quiero olvidar.
¿Acaso no lo justifica?
Porque el olvido es bueno.
Porque no me gusta quedarme estancada.
Porque tengo mil razones para no perder mi tiempo enojándome, 
aunque solo recuerde dos.
Prefiero la tristeza al enojo.
Me gusta la tristeza, porque no soy lo
Suficientemente valiente,
Para enojarme y explotar.
Porque soy una cobarde.

Tal vez nunca deje de serlo. 

miércoles, 17 de junio de 2015

Amor propio inexistente.


Yo lo sé, tú lo sabes, y para este punto, creo que ya todos son conscientes de ello.
Yo tengo una autoestima del carajo.
Si, lo sé, y lo acepto.
De hecho, me acostumbre a sentirme inferior. 
A sentirme mierda.
La gente debería de entender que sus comentarios diciéndome que soy especial, que soy bonita, que soy delgada, y muchas otras cosas basadas en lo superficial, ya no servirán de nada.
Que mientras yo me vea común, fea, y tonta, nada podrá cambiar la percepción que tengo sobre mi misma.
En fin, la burbuja se rompió el sueño se acabó, eso es todo. 
No hay más, te enfrentas a tu cruel realidad, eres arrastrada por tus propios demonios.
Ya no importa si te ves bien, si eres agradable, al final del día, eres tú, sola frente al espejo, la que se desprecia a sí misma.


[4]


Muévete, camina, corre, no te detengas.
No veas atrás.
No te arrepientas.
No pienses.
No digas.
No. No. No.
No hagas nada.
Huye. Huye. Huye.

Atrévete a ser cobarde.

sábado, 11 de abril de 2015

Despedida.

Recuerdo que me sentía entumida.
Anestesiada.
En el momento de decir adiós, ella se quedó llorando.
Y ellas lloraban también.
Pero yo no.
Yo no sentía nada.
Ni dolor, tristeza, enojo, angustia, desesperación…
Nada.

Aun me sigo sintiendo así.

viernes, 27 de marzo de 2015

Sin sentido alguno.

Hay cosas buenas, y hay cosas malas.
Pero eso ya todos lo saben.
La vida es eso, los buenos ratos.
Los malos ratos.
Decepciones.
Carcajadas.
Lágrimas.
Sonrisas al viento.
Es solo un borrón.
Una mancha en el tiempo.
Siempre seremos un recuerdo.
Bueno o malo.
Siempre estaremos oscilando.
Tratando de vivir.
Bien o mal.
Somos fragmentos esparcidos en el tiempo y espacio, y, aunque a veces no encajan bien.
Están ahí.
Somos nosotros.
Tratando de ser algo.
Cuando en realidad, ya lo somos.
Siempre lo fuimos.
Siempre lo seremos.
No hay un principio.
Y tampoco hay un fin.

sábado, 14 de marzo de 2015

Viajes.

Lo único que veo son las siluetas deslizándose mientras todo bulle a mí alrededor.
La música suena en mis oídos y me dejo llevar por las sombras que hay en la oscuridad.
Por eso me gustan los viajes.
Me gusta observar como todo se difumina.
Me gusta imaginar cosas en las sombras.

Me gusta imaginarte a ti. 

lunes, 2 de marzo de 2015

Sin titulo.

Me siento mal conmigo misma seguidamente.
No puedo.
Son efímeros periodos de felicidad.
De alegría. 
Y es larga la caída. 
Es fuerte. 
Son largos periodos de inconformidad y rechazo hacia mi. 
Hacia todos. 
Me odio por ser así. 
Por tratarme así.
Pero, aunque se que esta mal, que no debería hacerlo.
Yo quiero hacerlo.
Me he acostumbrado a mi  misma al desprecio. 
Me he condenado yo sola. 

martes, 24 de febrero de 2015

Futuro.

Hoy, en clase, me han preguntado que es  lo que yo quiero ser de grande.
Cuando vaya a la universidad.
Cuando sea mayor de edad.
Se supone que debo tener una idea clara de lo que quiero ser.
Pero el problema, es que no sé.
No tengo idea de lo que pasará conmigo.
No sé si concretaré una expectativa a largo plazo.
Ni siquiera sé, si en un arranque de depresión termine matándome.
No me conozco.
No sé que es lo que quiero ser.
No sé, si hay un futuro para mi.

miércoles, 11 de febrero de 2015

Pequeños retazos de mi.

Soy yo, fragmentada en mil pedazos.
Soy yo, perdida.
Soy yo, sola.
Soy yo, vacía.
Soy yo, triste.
Ya no sé quien diablos soy; hay tantas de mí, que ya no sé cual es la real.
Esta la Mary feliz. 
Esta la Mary triste.
Esta la Mary enojada, con todos, consigo misma.
Ya no sé en quien creer, ni cual es la real.
Mi vida es un vaivén de emociones.
Una montaña rusa de pensamientos.
Estoy asustada.
Me siento tan triste; me siento tan feliz.
Vivo efímeramente entre pensamientos y sentimientos contradictorios.
Estoy perdida.
Pero me niego a encontrarme.

sábado, 31 de enero de 2015

Hipocresía.


Me odio por ser tan cobarde, por no decirles a los demás que es lo que quiero, por no tener el valor suficiente para salir al mundo y que sepan quién soy.
Solo me siento a esperar a que algo relevante suceda en mi vida.
Vivo la vida que los demás quieren que viva.
Aun trato de esforzarme para cumplir sus expectativas.                                      
Si ya me decepcione a mí al ver el monstruo en el que me convertí, ¿Para qué decepcionarlos a ellos? Solo trato de aparentar que todo está bien, me engaño a mí misma, vivo detrás de una máscara.
Y me odio, por ser así, tonta ingenua y cobarde, sin una pizca de valor en mí.
Ignoro la mirada triste que me da mi reflejo y como miro al vacío constantemente, y sonrío, o por lo menos lo intento, lo último que quiero es que me pregunten si me encuentro bien y yo tenga que mentir, al decir que sí, lo estoy. 

jueves, 29 de enero de 2015

Neutralidad.


Llega un momento, un instante en el que todo cambia.
Solo es una milésima de segundo, la que cambia tu apreciación hacia todos, hacia ti mismo.
Ya nada te sorprende, nada te devuelve esa… chispa.
El brillo en tus ojos ya no está, y solo eres capaz de formular pensamientos tristes, pensar en cuan perfecta podría ser tu muerte.
Vives aislada, encerrada en tu mente, renuente a ver la vida de otro color que no sean matices grises, te auto castigas, te impides ser feliz.
Eres tu propia auto destrucción, tu propio infierno.
Dicen que somos la suma de nuestras decisiones, bueno, yo por ejemplo decidí ser mi propia destrucción.
¿Qué harás tú?

lunes, 26 de enero de 2015

Desesperación.


  
Me controlan, saben lo que hacen.
Ellos deciden por mí.
Ellos ya saben que haré, como seré, y cuál es mi propósito en esta vida.
Estoy en mi propia prisión, encerrada en fantasías que se desvanecen como copos de nieve a mi alrededor, sueños rotos.
Espejismos de mi misma siendo alguien que no merezco ser.
Ya no hay esperanza, no hay fe.
Solo soy yo, un cuerpo inerte que va a la deriva esperando la luz, esperando un final en esta maraña de oscuridad y dolor.
Las lagrimas ya no funcionan.
Nada me satisface, me estoy quedando vacía, sola y sin vida.
Veo la vida, con una indiferencia cruel.
Ya nada tiene sentido, ya nada me hace feliz.
¿Lograre hacerlo? ¿Saldré con vida de esto? ¿O moriré en el intento?
 


 

domingo, 18 de enero de 2015

Sin titulo aparente.

Ella es tan delgada que duele verla, es tan linda que la poca autoestima que tengo se esfuma. 
A veces me odio por ser así conmigo misma, teniendo tantos complejos y amargura insana por dentro.
Vivo en un cascaron, rodeada de pensamientos que me destruyen completa. Me quedo mirando al vacío, pensando en cuanto odio ser yo. 
Cuanto odio mi vida. 
No recuerdo cuando empezó todo, cuando empecé a ser así. Mala, siniestra y cruel conmigo. Y todos. 
Lo único que sé es que ya está en mí, instalado, y probablemente nunca salga. El desprecio que siento hacia mi persona es grande. 
Ya no tengo esperanzas de mejorar, de ser alguien irremediablemente feliz, satisfecha, con todos y consigo misma. 
Ya no, comprendí que el conservar falsas esperanzas no me llevara a ningún lado. 
Y está bien, y me gusta, es mejor eso, que caerme de mis falsas expectativas y morir en la caída.

sábado, 17 de enero de 2015

Felicidad.

Tan efímera, irreal.
Inexistente, es corta, y solo pocas personas tienen el lujo de poseerla, es un simple estado de ánimo, y todos deberíamos entender que no es un estilo de vida.
Que llega a ti, cuando menos te lo esperas, que está en ti, y ni siquiera lo sabes.
Yo no sé, si hay felicidad en mí.
Soy capaz de reír, bromear, y sonreír. 
Pero no sé si es real o es una manifestación de mi cuerpo para guardar las apariencias.
En ocasiones, la tristeza inunda mi sistema e intoxica mi corazón, me corroe y destruye.
Y yo misma soy mi propia auto destrucción, soy yo la que no me permito ser feliz.

Pero en realidad, ¿alguna vez somos felices de verdad?  ¿O solo guardamos las apariencias? 

martes, 13 de enero de 2015

Monotonía.

Naces, creces, te reproduces y mueres. 
Es el ciclo de la vida. 
Estamos programados para desempeñar un papel en la mediocre sociedad. 
Creeremos que somos alguien, cuando en realidad no somos nadie.
Viviremos la vida que los demás quieren que vivas. 
Seremos solo un numero. 
Seremos presos de una rutina impuesta por nosotros mismos. 
Educaremos a nuestros hijos así, ese sera nuestro único legado.
Nunca seremos nadie.
Hoy estas aquí, leyendo esto. Mañana tal vez no.
Vivirás tu propio infierno monótono, creado por ti. 
Tu eres tu propio carcelero, eres tu propio esclavo. 
Solo seras alguien mas, alguien insignificante.
Seras una tumba mas, un familiar muerto mas. 
Nunca seras nadie. Y sin embargo, creerás que lo eres. 

lunes, 5 de enero de 2015

Odio.

Quiero golpearte, quiero hacerte sufrir como tu me haces sufrir a mi.
Quiero verte llorando, gimiendo de dolor. 
Quiero, que veas el odio y el asco en mi mirada, que sientas lo que yo siento. 
Quiero verte pidiendo clemencia.
Quiero que me tengas miedo.
Que me respetes.
Que dependas de mis ganas de hacerte daño.
Pero no puedo, porque soy una buena persona.